miércoles, 7 de marzo de 2012

Quisiera.


Quisiera ser tu día y tu noche, amanecerte y anochecerte.
Quisiera ser la brisa que toque tu rostro y el cielo en el cual reposes tu mirada.

Quisiera ser la línea que se haga poesía en esta historia.
Quisiera ser la sombra que el silencio absorbe en la tenue soledad.

Quisiera ser tus miedos y anhelos. Quisiera poder estar a tu lado; amarte, amarnos.
Quisiera que me quisieras, que me escribieras en cada línea del libro de tu vida, de tu historia.

Quisiera ser la despedida de los profusos versos que pronuncian tus labios.
Quisiera ser el suspiro que recorre el viento y yace del murmullo en tus sueños.

Quisiera explorar y recorrer tu cuerpo de punta a punta; sentirte en cada beso y en cada suspiro.
Quisiera sentirme tuyo y tú mía.

Quisiera ser el encuentro del verso en el cauce de mi pluma.
Quisiera ser quien dibuje los paisajes al compás del poema, acariciando el frío que quema por dentro.

Quisiera ser la ventana donde caen tus estrellas que desde afuera iluminan el amanecer.
Quisiera ser el acorde que cubra tu melodía de pasión.
Quisiera escucharte.

Quisiera un nosotros eterno, sin un inicio ni un final, simplemente etéreo.
Quisiera vivirte en cuerpo y alma, más que en letras y sueños.
Quisiera serte.


Gracias Yeli por permitir esta mezcla de letras. Todo un placer.